El pasado sábado todo el club se trasladó a al Palacio del Paintball de Los Palacios. Además del autobús, tuvimos que llevar una furgoneta, para transportar a los 60 guerreros que se batirían en duelo. La emoción se cortaba en el ambiente.
A las 12 ya nos dieron los uniformes. El duelo fue el siguiente: los niveles 0, 1 y 4 contra los niveles 2 y 3. La emoción estaba asegurada...
La primera batalla consistió en conquistar la base del enemigo. En un cementerio de autobuses y coches, cada equipo debía proteger su propia base, con un comando, y conquistar la contraria. Pero mejor escuchemos al Comandante Caíto, que encabezaba el ataque: "El General Guindo me ordenó conquistar el autobús enemigo. Siempre supe que sería una batalla compleja, así que me rodeé de mis mejores hombres para lograr la misión". Uno de esos hombres de confianza de Caíto era Paco: "Las balas del enemigo me silbaban a pocos centímetros. Cualquiera se habría quedado escondido en un coche, pero mi comando tenía esa dura misión, y cada uno de nosotros sabíamos que había que sacrificarse por el buen fin de la misión, que cualquiera de nosotros habría sido capaz de caer en el campo de batalla por salvar a un compañero". La batalla primera la ganó el equipo del General Guindo.
Tras un par de batallas más, por fin llegó un merecido descanso. Todos estábamos emocionados: "esto es alucinante", como decía Gonzalo S. Después volvimos a la batalla, que duró hasta las tres. Finalmente el Comandante Boceta firmó la paz con el Comandante Taylor... todos lo celebramos con una gran comida. Joaquín G., que siempre fue cauto en la batalla, brindó con Coca-Cola con todos sus compatriotas: "Ésta ha sido la mejor victoria de mis últimos años."
Tras la comida, nos recogió el autobús, después de explorar la zona y disfrutar de un merecido descanso.
Pero al nivel 4 se le quedaba pequeño el planazo, por lo que jugamos un partido de fútbol 7 contra un club de Málaga en el Charco. Álvaro M. y los suyos demostraron que no hay quien les gane... de hecho empatamos a 5.